EN LA COMEDIA, CADA PUNTO DE GIRO DEBE SER PREVISIBLE PERO INEVITABLE.
“Lecciones de cine” con Juan Taratuto
Juan Taratuto habla en tono de comedia. Sus ojos anticipan el humor de sus palabras. Después que Gustavo Castagna, moderador de este ciclo organizado por DAC en el CENTRO CULTURAL DE LA COOPERACION, comenzara invocando sus comedias favoritas del cine argentino y norteamericano, Taratuto le contesta: No soy cinéfilo, no tengo ni uso nunca referencias de otras películas. Hago comedias de autor, mis películas reflejan mi vida, son parte de ella.
Una chica me había abandonado y quedé muy triste, tanto que quería hacer una película para contarlo. Hasta entonces quería filmar pero no sabía qué. Siendo asistente conocí una actriz que me gustaba mucho pero con la que por mi timidez no sabía cómo entrar en relación. Entonces recurrí al viejo truco, le dije que estaba por hacer una película y quería que ella actuara, proponiéndole juntarnos para charlarlo. La noche previa a la cita, escribí la primer sinopsis de “No soy yo, soy vos”. Hoy ella es la madre de mis hijos.
A continuación, Taratuto comparte toda su experiencia:
El humor es la tragedia mas tiempo, aclara. Para que una comedia interese debe respetar un código básico: tener un héroe que cometa un error y lo solucione positivamente al final. Cada “plot point” o punto de giro debe ser previsible pero inevitable. Hay situaciones mejores que otras, por ejemplo la vergüenza. Donde hay vergüenza hay oro en polvo para el guión. Guión, actores y edición son el 75% de una comedia. Lograr una buena química entre los actores y ensayar mucho atendiendo sus propuestas, genera un guión de hierro para poder rodar con total seguridad sin cambiar una coma. Después, la edición, el montaje, es el alma de cualquier comedia cinematográfica.
¿Y la televisión ? pregunta la concurrencia. Taratuto responde sin dudar: Corrí mucho. En total 1 año de trabajo. Seis meses en el guión, vale la pena trabajar un guión, cada nueva versión siempre es mejor. Dirigí los primeros 6 capítulos y luego continuó dirigiendo un director de televisión. Yo seguía los libros que hacía un guionista y editaba con Pablo Barbieri, mi editor. La TV repercute mucho pero es muy efímera. La obra dura muy poco y no permite detalles ni sugerencias. ¿Volvería hacer televisión? Lo pensaría 2 veces, 3 también.
La última conclusión para terminar: la comedia no da prestigio pero es un instrumento para contar otras cosas.
El compacto de la charla brindada por Juan Taratuto pronto estará disponible en nuestro sitio web, donde ya pueden verse también las otras “lecciones de cine” de este primer ciclo ofrecidas durante el año por Adolfo Aristarain, Fernando Spiner, Gustavo Fontán y César D’angiolillo. Estos encuentros con los directores continuarán el año próximo, siempre especialmente organizadas por DAC en el CENTRO CULTURAL DE LA COOPERACION.
Archivo: Info DAC N°82
